Los ecologistas han logrado una plena adaptación a los rebañosOuteiro está cubriendo prácticamente en su totalidad el programa promovido por la Xunta de Galicia para protección del ganado e indirectamente del propio lobo, a través de la Asociación de Criadores de Ovino e Caprino de Galicia (OVICA). Hasta que se experimentó este método piloto por iniciativa del grupo, los ganaderos recibían los mastines con dos meses y medio de edad y en algunos casos los perros no lograban adaptarse a los rebaños. La situación ha cambiado, según apuntó Francisco Valeiras, responsable del colectivo, dado que ya se dispone de una pareja reproductora genéticamente seleccionada para criar en las instalaciones ubicadas en Seoane, que se dedican también a la recuperación de diversos animales, sobre todo, aves.
De esta forma, la adaptación se realiza paulatinamente desde su nacimiento, prolongando el proceso hasta los cuatro o cinco meses, y los resultados están siendo muy positivos, ya que ninguno de estos canes ha tenido problemas de adaptación en las explotaciones ganaderas. Desde que se inició el programa, Outeiro ha repartido 120 mastines por toda Galicia. En la actualidad tiene 18 cachorros, de los que 13 ya están preparados para ser entregados. La demanda, según los miembros de Outeiro, ha bajado ligeramente, pero 'é debido a revalorización dos mastíns, xa que agora son moitos os que os crían particularmente'.
Durante el tiempo que se prepara a los perros para su futura adaptación al rebaño es necesario corregir actitudes como los juegos en exceso con las ovejas y, también, la intolerancia a compartir la comida o comer al lado de otros animales.